Islandia está de moda, todo el mundo quiere visitar este fantástico país, pero… ¿sabes cuáles son los sitios más visitados que debes conocer antes de aterrizar?
En este artículo te mostraré, por orden de preferencia, los lugares más visitados que no debes perderte en esta pequeña aventura por la isla.
Empezemos…
Una impresionante cascada creada como consecuencia de la ruptura de las placas tectónicas, que ofrecen una de las estampas más espectaculares del paisaje islandés. Ubicada en el cauce del río Hvítá podemos observar claramente la mezcla del poder de los glaciares y las grietas de las placas de la corteza terrestre.
Es el géiser más antiguo conocido. Ubicado en el Valle de Haukadalur, un lugar espectacular donde se puede visitar uno de los pocos géisers que se encuentran activos, el geysir Strokkur que eclosiona aproximadamente cada cinco minutos y puede alcanzar una altura de unos 25 metros.
Situada en la zona sur de la isla, no lejos de Skógar y cerca de la cascada Skógafoss en el recorrido del río Skógá. Es la única cascada que te permite caminar por detrás del salto de agua y atravesarla de lado a lado. La visión única que ofrece sus vistas desde el punto de vista en que el agua se lanza al vacío hace que sea una de las más espectaculares de la isla.
En el recorrido del río Skógá, en el sur de Islandia, con una anchura de 25 metros y una caída de 60 metros, en días soleados es muy fácil ver el arco iris simple o doble como consecuencia de la cantidad de humedad que produce la espuma de la cascada.
Situada a pocos metros del lago Jökulsárlón, esta atípica playa de arena negra ofrece el espectáculo único de ver sobre su superficie icebergs en lugar de conchas. Desde su orilla es habitual poder avistar focas y aves marinas, especialmente charranes árticos y skuas, grandes gaviotas que anidan en el suelo de los alrededores del lago y que ocasionalmente pueden ser agresivas.
El mayor y más conocido lago glaciar de Islandia. Tiene una profundidad máxima de aproximadamente 200 m, lo que lo convierte probablemente en el segundo lago más profundo de Islandia. Una de sus características más llamativas es que se encuentra lleno de icebergs que se desprenden de la lengua del glaciar Breiðamerkurjökull, y que desembocan directamente en el mar.
Es una montaña de origen volcánico situada en Grundarfjörður, en la península de Snæfellsnes. Denominada también ‘montaña iglesia’ (su parte más alta parece el tejado de un templo), tiene una altura de 463 metros y laderas empinadas. Los pescadores locales también la denominaban ‘sugar top’, por su apariencia esponjosa cuando su cumbre está nevada y es una de las imágenes más representativas de Islandia junto a su cascada Kirkjufellsfoss, situada a pocos metros de distancia. Para los amantes de la fotografía es una de las más apreciadas para capturar la claridad de la caída de sus aguas con la luz del sol de medianoche, o en invierno, para combinarla con las auroras boreales.
(Búðakirkja). Considerada monumento nacional. Esta iglesia perdida es un oasis de espiritualidad en mitad de un paisaje casi primigenio, se encuentra en la punta más occidental de la península de Snaefells, en una pequeña aldea, en los campos de lava de Búðahraun en Staðarsveit. Esta localidad fue mencionada por Julio Verne como punto de partida para iniciar el viaje al centro de la Tierra.
En dirección a la población de Höfn, en la Península de Stokksnes, es una de las pocas montañas de roca ígnea en Islandia que se encuentra al pie de una playa volcánica y que sus características formas góticas nos recuerdan a un conocido personaje de cómics, de ahí su apodo como monte “Batman”.
Una de las más espectaculares de Islandia. Se encuentra al inicio de la carretera de las tierras altas de Sprengisandur. Las aguas alimentadas por el río Skjálfandafljót caen desde una altura de doce metros y a lo largo de un ancho de treinta metros. Todo un espectáculo.
Seguiremos con los lugares poco visitados y los menos visitados… sigue atento.